Los científicos calculan que tan solo medio
minuto de risa alegre equivale a cuarenta y cinco minutos de reposo absoluto”,
informa el semanario polaco PrzyjacióÅ‚ka.
EL PODER CURATIVO DE LA RISA
Fui víctima
de mis padres cuando me imponían sus creencias: “los hombres no lloran”. “Ya
está llorando como una nena”. “Coja seriedad en las turmas”. “No se ría, no sea
payaso”.
Con los años
comprendí que esas creencias había que controvertir, experimentando el
llanto y la risa. Y comprobé que con el llanto descansaba y disminuía el dolor,
recuperando, luego, el estado de ánimo anterior. Me di cuenta desde niño y en
la pubertad que estar bien y contento era muy fácil; por eso en la escuela y
más luego en el colegio entre los amigos reíamos a todo dar.
Los teóricos
y científicos han demostrado que la risa es una medicina para el alma y para el
cuerpo. Para esta semana transcribo las tesis de algunos curiosos de la
ciencia:
La risa
puede considerarse una medicina preventiva y eficaz, y se la debe tener en
cuenta como terapia paralela a los tratamientos convencionales.
Tan simple y
tan compleja es la risa que resulta imposible definirla de una sola vez, ya que
como fenómeno humano tiene implicaciones fisiológicas, psicológicas y
culturales.
“Los científicos calculan que tan
solo medio minuto de risa alegre equivale a cuarenta y cinco minutos de reposo
absoluto”, informa el semanario polaco PrzyjacióÅ‚ka.
Añade que “una carcajada espontánea es
igual a tres minutos de ejercicio aeróbico, y diez sonrisas cálidas son como
remar vigorosamente durante diez minutos”.
Otros
beneficios de la risa son que entra tres veces más aire a los pulmones y mejoran
la circulación, la digestión, el metabolismo, la actividad cerebral y la eliminación
de sustancias nocivas.
Como ayuda
para alcanzar un buen estado de ánimo, la revista recomienda sonreírse a sí
mismo, sonreírles al cónyuge y a los
hijos a primera hora de la mañana. “Aprenda a reírse de sí mismo —añade—. Intente ver el lado bueno de las
cosas aun en medio de situaciones difíciles.”
Otro grupo
de científicos de la Universidad de California descubrió que la risa tiene un lugar definido en el cerebro, que es el
lóbulo parietal izquierdo. Y lo que sí puede decirse es que es una respuesta
emocional que se da automáticamente ante un estímulo.
Hace más de
25 años que se viene aplicando esta terapia en países como Canadá, Francia,
Estados Unidos y Suiza, y los resultados han sido muy exitosos.
El objetivo
es amortiguar el impacto emocional que producen las enfermedades. Se busca que el paciente se
abstraiga de su situación dolorosa, libere su mente de la tensión que le
produce la enfermedad y se centre en ideas y pensamientos alegres que le hagan sonreír, ya que gracias a
la risa se logran estados de ánimo positivos que influyen en cuerpo y mente.
Los
beneficios que se derivan de un estado de ánimo positivo en contraposición al estado de ánimo negativo han sido muy
estudiados en los últimos tiempos, y se ha demostrado que las situaciones de estrés
crónico tienen como consecuencias, entre otras, un aumento de la presión
arterial y una mayor tendencia a la depresión y la ansiedad. Estas
condiciones mejoran cuando la persona estresada ríe de veras y se anima. Reírse es una respuesta adaptativa
que promueve la salud.
Estudios experimentales que demuestran la
risa genera salud.
1. El primer
caso documentado que demuestra el poder curativo de la risa ocurrió en Estados
Unidos en 1976. Fue el caso del editor de la revista estadounidense Saturday Review,
Norman Cousins. Después de que le diagnosticaran una espondilitis anquilosante (Enfermedad
que ataca la espina dorsal y provoca parálisis) descubrió que por medio de la
risa se aliviaban las molestias de su costado y verificó que 10 minutos de risa
le daban dos horas de sueño sin dolor. Durante meses vio películas cómicas,
leyó libros de humor y al cabo de un tiempo pudo volver a caminar e incluso a
practicar deporte.
A partir de
entonces no se paró de investigar, y diversas pruebas de laboratorio indicaron que,
en pacientes que veían una película cómica, la concentración de inmunoglobulina
salivar subía al doble y disminuía el cortisol, que es una hormona
inmunodepresora que baja las defensas del organismo: la hormona del estrés.
2.
Terapia
holística
La crisoterapia
es un método o terapia holística. Abarca lo físico, lo mental, lo emocional y
lo espiritual. Se trata de que las personas tengan las herramientas necesarias
para lograr una armonización psicofísica y vuelvan al eje en caso de
desequilibrio causado por hábitos mentales negativos.
Al comenzar
a reírse, no importa si es una risa verdadera o forzada. Basta con simular el
gesto para que la inconsciente crea que es cierto, mande la orden al cerebro y
éste genere endorfinas. De
acuerdo con los especialistas, hay que reírse por lo menos tres veces al día y
la duración de las carcajadas debe ser de, al menos, 10 segundos.
Podemos comenzar sin ganas, porque después nos sentiremos mejor y la risa
surgirá espontáneamente.
Si bien no se puede considerar a la risoterapia como
una técnica absoluta que cura por sí sola, hay que tener en cuenta que es una
terapia preventiva y de apoyo que, en algunas ocasiones, puede ayudar a atenuar los
síntomas de una enfermedad y a mejorar el estado anímico del paciente, lo cual
propiciará su recuperación.
Los efectos que la risa produce en el
organismo humano son múltiples:
Ejercicio: con cada
carcajada se movilizan cerca de 400 músculos, incluidos algunos del estómago
que sólo se pueden ejercitar con la risa.
Masaje: las
columnas vertebrales y cervicales, donde por lo general se acumulan tensiones, se
estiran. Se estimula el bazo y se eliminan las toxinas. Con este movimiento el
diafragma origina un masaje interno que facilita la digestión y ayuda a reducir
los ácidos grasos y las sustancias tóxicas.
Limpieza: se lubrican y limpian los ojos con lágrimas. La carcajada hace
vibrar la cabeza y se despeja la nariz y el oído.
Oxigenación: entra el
doble de aire en el cerebro, y los pulmones mueven 12 litros de aire, en vez de
los 6 habituales, lo que mejora la respiración y aumenta la oxigenación. Con
esto se desmiente la idea de que la risa provoca arrugas en el rostro que, por
el contrario, se tonifica. El mal genio y fruncir el ceño es lo que produce las
arrugas.
Felicidad: favorece la
producción de endorfinas y encefalinas en el cerebro, que son los
neurotransmisores (formados por cadenas de aminoácidos) que se encuentran sobre
todo en el sistema límbico y cuya función es combatir el dolor disminuyendo la
receptividad del organismo ante estímulos dolorosos; es así como la risa
disminuye la intensidad del dolor físico.
Elimina cansancio y estrés: la risa
genera dinamismo (dinamogenética), por eso al reírse usted elimina el cansancio
y el estrés, efecto equivalente a una sesión completa de yoga. Un niño sano ríe
300 veces al día, a medida que crecemos y nos vamos llenando de recuerdos
serios, la risa es cada vez más costosa. Cuando de niño se le ha bloqueado el
llanto ("los hombres no lloran"), al llegar a adulto se hace más
difícil reír. Esto lo he podido comprobar en muchos pacientes, la explicación
es que la bioquímica del llanto es la misma que la de la risa.
Distinción entre sonrisa, risa y
carcajada:
Tenemos que distinguir entre la sonrisa, la risa y la carcajada. La sonrisa es un esbozo que concierne, ante
todo, a la boca y a los labios. Como escribió un experto: "La sonrisa
es la manera más fácil de curvar una línea recta". Aparece como señal de
agradecimiento, asentimiento, ternura, compasión o empatía.
La risa, por su parte, dilata todo el
sistema muscular arterial con el consiguiente rubor por el efecto de los
capilares dérmicos del rostro y el cuello. La
risa es un estallido, una entrega, una expulsión de aire viciado e
incorporación de aire nuevo. La carcajada es la extroversión
máxima de la risa.
El valor terapéutico de la risa
Es sabido
desde la antigüedad que la risa tiene valor terapéutico. La ciencia lo ha demostrado
y el nombre que recibió esta técnica es risoterapia.