En mi imaginario, Thailandia era un país con una capital con escenarios para hacer películas de guerra, espionaje, sexo y aventura. Había leído algo sobre la guerra de Vietnam, Camboya y Laos, pero en Colombia es poco conocida la vida de quienes hicieron posible esta nación en tierras exageradamente bellas.
El reino de Tailandia, como es reconocido, esta poblado en un 75% por la etnia thai que emigró desde china en el siglo X de la presente era, guerreándose el terreno con los birmanos que en alguna ocasión los derrotaron, por unos años, dándose posterior confrontación, muy igualada hasta tal punto que los jefes de cada ejercito se enfrascaron en un duelo que libraron montados cada uno en un elefante, siendo derrotado el guerrero birmano, y desde entonces, se estableció la monarquía cuyo rey solucionaba todo tipo de problemas que consultaban los subditos yendo al palacio y tocando una campana a cuyo tañer, acudía el rey a dar el consejo o el veredicto. Los thai trajeron el budismo theravada, declarada posteriormente la religión nacional que en sus practicas posteriores, se presentan mezclas con el hinduismo y con costumbres malayas, jamer y chinas por ser el resto de la población de estos grupos humanos. Asi se aprecia en la diversidad de templos y pagodas dispersos en bangkok.
El país es el único en el mundo con un monarca con mas de 60 años en el poder pero también lo es en la producción de frutas como la mandioca, cacahuetes, pomelo, zapote, mangostán, durián, mango, rambután, anona y otras frutas características de Thailandia que constituyen una fuente importante de ingresos para la Nación.
El 90% de la superficie del país es apta para la agricultura y esta cubierta en arrozales y junto con el vecino Birmania, son los primeros productores mundiales de este cereal. Desde hace décadas cuenta con canales de riego aprovechando la riqueza hídrica bien utilizada en la explotación pesquera y agropecuaria; muchos de esos canales son usados como mercados flotantes.
La gastronomía thailandesa y su riqueza frutícola
Estando en Bangkok y caminar por sus calles y plazas de mercados, pasear en tuc-tuc, recorrer la ciudad en metro elevado, desplazarse en taxi a atractivos turísticos naturales y construidos por el hombre, como viajero ocasional, siempre me sorprendo ante las bellezas no conocidas que deleitan los sentidos y lo postran con admiración. Esa admiración que en esta historia comparto con usted mediante un registro fotográfico para que se usted mismo quien decida si estamos de acuerdo que Thailandia es otro manantial de riqueza humana y geográfica que merece visitarse, degustarse, admirarse y recordarse.
La comida thailandesa es una de las mas exóticas y sofisticadas del extremo oriente. A la vista es un arco iris y una mezcla de sabores dulces, salados, agrios y picantes que engolosinan a cualquier paladar.
Carne de tiburón acompañada con arroz.
Los camarones representan el diez (10%) por ciento de las exportaciones del país. Se ofrecen en lujosos restaurantes y en la calle, preparados en diversas formas. Igual los demás frutos del mar.
Los frescos frutos del mar se ofertan a precios de una empanada colombiana
Las carnes de diferentes animales, ya porcina, bovina, caprina, avícola y patícola , así como reptil y anfibia esta en el menú para los diferentes paladares y costumbres.
Vísceras
Carne caprina y patícola.
Algunos sapos y ranas son apetecidos por un grupo poblacional.
La carne porcina y avícola se ofrece preparada en diversas formas y sabores.
Frutos del mar al alcance de todos los bolsillos.
El comer en la calle no es cuestión de clase social enThailandia. Es asunto cultural que disfrutan propios y extraños.
Los vegetales, las pastas y el arroz se mezclan o combinan saliendo a la mesa platos con gusto estético y gastronómico que convocan al viajero a ser un curso intensivo de culinaria thailandesa reconocida por las diversas salsas que con productos naturales se preparan convirtiendo el paladar en una paleta para degustar sabores.
El comer en la calle no es cuestión de clase social en Thailandia. Es asunto cultural que disfrutan propios y extraños.
Visitar a la familia, incluso a los amigos, y con mas veras los pueblos, ciudades y naciones, es un placer para quienes se emboban con la belleza natural y artificial, con la gastronomía con sus dulces y chocolates, con las bebidas con licor y sin él. Thailandia es un país que colma las expectativas de ese viajero o visitante curioso y ganoso de contemplar y experimentar con los sentidos para embobarse y gozarse de la bobada.. Con las siguientes fotografías intento demostrar lo anteriormente afirmado.
Cervezas con diferentes grados de alcohol, sabor y materia prima.
Frutas nativas al gusto del consumidor, ya sea con pulpa o en jugo con la presentación que gozan los jugos azucarados y dañinos que abundan en los supermercados se ofrecen en las calles y plazas de mercado
En Colombia creemos que las mejores manzanas son las provenientes de Chile, pero en Bangkok encontramos éstas que superan en color y sabor a las conocidas.
Jugos naturales se consiguen en todas partes licuados con pulpa fresca servidos en vasos con distinta capacidad.
Peseando por Bangkok usando diversos medios
Pasear, caminar, conocer, observar es un gusto humano que reconforta el espíritu, permite reconocer lo poco que conocemos,lo ínfimo que construimos, lo mucho que destruimos y lo novedoso que hacen los emprendedores.
El pasear es una acción que quienes pueden y tienen como hacerlo, lo usan y lo aprecian de diversas maneras. Hoy lo común es ir de compras a los centros comerciales, otros visitan riquezas arquitectónicas, antropológicas y centros de arte, teatro y música; otros solo bares y discotecas; pero hay otros como yo que viajamos para dar gusto a la vista, al paladar y para sorprenderse con las rarezas y novedades. Se conoce caminado, se conoce usando medios de transporte, libros, y en especial fotografías. Con el aprecio al lector hice este registro fotográfico para que junto conmigo, viaje por Bangkok en diferentes medios.
En Tuc- tuc
|En el metro elevado. Los tiket se toman en el surtidor electrónico.
El surtidor de los tiket para el metro
Una fotografía en una estación del metro.
Las comodidades en el metro
Los modelos de taxis del servicio público.
Las porcelanas thailandesas tienen reconocimiento mundial por el diseño y calidad.
En el acuario Siam Ocean World de Bangkok
El acuario esta ubicado en el campus principal de la Universidad Kasetsart; es una de los mas grandes y espectaculares de la región surasiatica construido en dos niveles en una área de diez mil metros cuadrados en pleno centro de la capital. El acuario es el hogar de alrededor de 560 especies de peces y mamíferos del mar y agua dulce, así como alrededor de 100 especies de plantas de acuario. Las especies incluyen bagres gigante, y peces tigre siameses dispuestas en siete zonas en las que se aprecia la fauna y la flora submarina.
El acuario es propiedad y está operado por el Departamento de Pesca de Tailandia y brinda al visitante recorrido individual o en grupo con costos adicionales hasta para gozar de una exfoliación de los pies realizada por peces diminutos, asistir a cine o pasear en bote para interactuar con algunas especies.
El servicio de observación es acogido por maestros y niños de la capital que visitan el acuario con cuaderno en mano en el que toman apuntes de lo que observan y escuchan de los guías que hay en cada sala dispuesta a orientar con fines pedagógicos.
Imágenes de habitantes de algunas zonas del acuario
El mercado flotante de Damnoen Saduak, un espacio para recordar como se mercadeaba antiguamente en la región.
Thailandia tiene numerosos mercadillos flotantes. Visitamos el mas cercano a la capital, distante unos cien kilómetros cubiertos en menos de dos horas en busetas que prestan este servicio a los turistas. Entre verdes de diversos tonos se hace el recorrido sin darse cuenta en el tiempo, pues arribamos a un lugar a campo abierto decorado con un altar a Buda y en él que tomamos una de las mas de veinte barcas en oferta, a la que nos trepamos dispuestos a darle gusto a la vista y a la contemplación mientras el barquero maniobraba el motor con el ruido de un camión f-900 adaptado por los thailandeses para ese menester cuyo recorrido se hace en el tiempo que determinen los contratistas que pueden gozarse el paseo, ya sea recibiendo las ofertas de los comerciantes que se movilizan en lanchas, o bajándose en cada estación en las que encuentran tiendas, restaurantes y bares al gusto.
El paseo por el mercado flotante de Damnoen Saduak es tan novedoso como hermoso hacerlo usando una buena cámara para dejar el registro fotográfico en esta historia que comparto con usted convencido que en el recorrido hay postales a cada paso convirtiendo el viaje a Thailandia en un grato recuerdo.
Barcas impulsadas con la fuerza de un motor de una camión F-900 tienen barqueros que se defienden con el ingles, el francés y el español para mostrar las bellezas que rodean el recorrido por unos canales hechos por el hombre para el riego y para servir de canales de comercialización en los que el campo productivo se mezcla con el comercio informal de la ciudad.
Partimos por este canal y regresamos por el paisaje de la fotografía inferior.
Los turistas en el desplazamiento en barca tienen la oportunidad de contemplar y fotografiar la fauna y la flora.
Atracaderos se encuentran adornando los canales, y en ellos, los turistas pueden apearse, caminar, visitar tiendas o hacer fotografías; pero si no se desea bajarse de la barca, en el recorrido las barcas son abordadas por canoas guiadas por mujeres trabajadoras que ofrecen artesanías, comida típica, frutas, bebidas, ungüentos chinos, recordatorios, flores y plantas.
En algún lugar del recorrido, el barquero atraca su barca invitando a los viajeros a que visiten una parcela de caña en la que muestran el proceso de molida y cocción para sacar dulce, convirtiendo las parcelas en unidades productivas en las que los turistas son bien recibidos, atendidos y orientados.
Templos y pagodas, centros de adoración y veneración.
Los católicos acuden a las Iglesias, los musulmanes a las mezquitas, los budistas a las pagodas, los judíos a las sinagogas y los hinduistas a los templos. Para el común de los seguidores de Cristo el templo es la misma Iglesia, pero el primero es el lugar a donde se asiste a los oficios religiosos y la Iglesia es el grupo de creyentes que acude a esa templo. Para los musulmanes, la mezquita es el lugar donde se acude a arrodillarse y estar postrado para agradar a Mahoma. Para los budistas, la pagoda es una torre con varios niveles en los que se depositan los restos de los creyentes y reliquias religiosas y se construyen cerca a los templos budistas. Las pagodas son generalmente levantadas en madera que se superpone sin usar clavos formando una estructura que ha soportado las inclemencias del tiempo y hasta terremotos. Los templos budistas e hinduistas son espacios para el canto, la meditación y la reflexión construidos con tanta belleza arquitectónica, que todos son un atractivo turístico para quienes no son de ese credo, y un centro religioso para los devotos. En cada construcción, según el credo se reflejan los orígenes culturales de donde proviene o se expandió inicialmente esa religión.
Templo budista
Altar budista.
Altar al elefante, como amuleto que premia a los creyentes con buenas cosas en cada etapa que se comienza. Es una costumbre hinduista en honor al dios con cabeza de elefante.
En pleno Bangkok encontramos este altar en honor al miembro masculino
Los templos hinduistas tiene una particular arquitectura acompañada con arabescos con colores fuertes pero armoniosos en la combinación y como en esta creencia hay varias divinidades, en la foto inferior mostramos algunas de las venerada en Bangkok.
Wat Pho el Templo del Buda Reclinado
Thailandia tiene numerosos templos y pagodas; visitamos el templo del Buda reclinado que contiene una estatua del maestro con una longitud de 43 metros de largo y 15 metros de alto construido dentro de un templo que es ocupado por la estatua y se dispone de un corto y estrecho espacio para contemplarlo. Es el mas antiguo de la ciudad, incluso antes que fuese declarada como capital. El templo forma parte de las nueve maravillas arquitectónicas erigidas en ocho hectáreas en cuyos espacios prosperó la primera escuela de masajes reconocidos en el mundo como los massage thai y fue la primera cátedra de medicina tradicional thai .
Es costumbre budista que los niños de hijos los devotos, al entrar a la adolescencia, ofrecen un año al servicio del templo, tiempo en el cual reciben la doctrina y hacen las practicas. Esta fotografía fue tomada dentro del templo que muestra a una parte de los jovenes en un momento de descanso.
El buda recostado
Otros templos en Bangkok
Buda no es un Dios, dicen sus seguidores thailandeses, por eso no se le venera, sino se le presentan respetos. Un Buda es una persona que ha alcanzado la sabiduría con el conocimiento a quien se le presentan respetos. Los seguidores se arrodillan, se tocan la cabeza con las manos, y luego las juntan en el pecho y se inclinan, o ponen las manos en el suelo y se inclinan aun más para mostrar los respetos. Esos respetos se manifiestan, cuando estando frente a él, la persona postrada realiza tres reverencias, la primera para mostrar respeto por la sabiduría y conocimiento, la segunda para mostrar respeto a su doctrina, y la tercera para mostrar respeto a los monjes que siguen sus enseñanzas para que el ser humano se libere de sus sufrimientos practicando el desapego. Entendiese el desapego la capacidad para asumirse uno como persona y enfrenar los problemas que se le presenten asumiendo las consecuencias que ellos acarreen, es aceptar que hay que vivir el momento, el ahora; es aceptar que en la vida se presenten cosas, sin necesidad de forzarlas y controlarlas; es renunciar al pasado y despreocuparnos por los miedos del futuro. Es concentrarnos en los asuntos buenos que nos trae la vida y estar agradecido por todo, porque nada sucede porque sí.
El desapego también implica aceptar la realidad, los hechos. Requiere fe en nosotros mismos, en Dios, en otras personas, en el orden natural y en el destino de las cosas en este mundo. Nos liberamos de nuestros pesares y preocupaciones y nos damos a nosotros mismos la libertad para disfrutar de la vida a pesar de nuestros problemas no resueltos.
Vista al acceso a un templo ubicado en una colina.
Detalle del acceso al templo budista ubicado en la cima de una montaña.
Otros detalles arquitectónicos del palacio de Bangkok
Los monjes budistas ayudan a los seguidores a disminuir el impacto del pasado, y los interesados en ello, deben ser generosos en las ofrendas, tanto en dinero como en especias, según las necesidades de los monjes
El buda esmeralda se encuentra en el parque del gran palacio de Bangkok. Esta tallado en jade verde con una altura de 45 cms con vestidos en oro en el 43 a.C. y proviene de la India, transportado inicialmente en barco y luego en elefante.
Piezas en madera artisticamente talladas se observan en los templos.
Los niños frecuentan los templos, animan con danzas y musca, incluso con flores amarillas que ofrendan en centros budistas.
Mercado de plantas un espacio para apreciar el trabajo de campesinos
En la capital thailandesa abundan los mercadillos diurnos y nocturnos atendidos por nativos de la sonrisa eterna que ofrecen a buenos precios y materia prima de buena calidad, toda clase de productos, incluso imitaciones duraderas. No hay un mercado que no visitamos organizado en 14 hectáreas, considerado el mas grande del mundo. Nosotros asistimos al mercado de las planta y flores convencidos que no compraríamos por el transporte, pero motivados por la contemplación de las especies allí a disposición y las obras que manos laboriosas hacen con las plantas nos gozamos este mercado que compartimos con el colorido que quedan los registros fotográficos.
Cerca al mercado de las flores y plantas, encontramos este mercadillo de libros que mezcla los originales con las imitaciones .
Parque de tigres, lugar muy visitado para interactuar con los felinos organizados por edades
El el país poblado por personas con sonrisa eterna y gozos de los tonos amarillos hasta naranja puede apreciar criaderos de cocodrilos, culebras y tigres. Viajamos a un parque cuyos dueños se dedican a criar estos felinos que tienen organizados por edades, por sexo y por servicio. Allí cada quien decide el grupo de tigres con los cuales desea interactuar y dejar como constancia de la estadía unas fotografías con el o los felinos.
Luego de registrarse uno espera el turno empezando por estar cerca a los animales separados por una malla, decían que era necesario estar cerca a los tigres para que se asimilaran los humores; luego con el cuidado y protección que demandan los domadores uno es introducido a la jaula junto con el felino que cual gatico se presta para que los fotógrafos del parque hagan el registro que esta disponible en medio electrónico en la tienda en donde uno paga un tanto igual al valor de la entrada para luego dar una caminata por el ecoparque, pescar y contemplar aves y almorzar posteriormente y disponerse al regreso a la capital.
Un paseo en elefante
Los elefantes como los tigres nacieron para ser libres, los primeros para vivir en manadas y los segundos para moverse solos, pero el hombre los ha domado con torturas y los ha usado para sus intereses, y en el caso, para satisfacer la curiosidad de los turistas. Y estando en Thailandia, la oferta de viajes en elefante están en hoteles y agencias de viaje. Fuimos a un parque de elefantes en lo que observamos que algunos fueron entrenados para pintar, otros para movilizar maderas y personas. En dos de ellos contratamos un paseo dentro de la reserva, sin tener en cuenta como fueron casados, domados y alimentados.
Elefante pintando.
Oleos pintados por elefantes.
Por la ruta del parque de los elefantes conocimos una reserva campestre propiciada por el Estado en la que se encuentran familias de las diversas etnias asentadas en el país, las cuales viven según sus costumbres y ofrecen artesanías que elaboran ante los visitantes, quienes pagamos algunos euros por entrar y hacer el recorrido.
Los masajes tahi, un servicio que prolifera como los dolores de espalda en occidente.
El masaje thai o yoga pasivo tiene origen en la India pero se desarrolló en Thailandia como recurso budista usado en la medicina ayurvedica usando técnicas de estiramiento pasivo y presiona sobre los músculos a tratar para disponer el cuerpo a la movilidad y flexibilidad disminuyendo la tensión corporal incrementando la buena circulación y energía a los tejidos corporales.
Esta técnica tiene origen hace mas de 2.500 años en la India y llego al país con los monjes budistas desarrollándose y exportándose junto con ayudas para mejorar el flujo del cuerpo combinados con las energías del espíritu.
Encontramos centros de masajes como restaurantes; los hay en la calle sentados en una silla para mejorar la circulación de las piernas, en edificios de un piso y hasta de diez pisos. Los masajes los hacen estando uno acostado en el piso sobre alfombras y colchonetas duras. Quienes hacen las terapias se especializan que hacerlas con las manos, con los codos o con los pies. De cualquier forma son terapias restauradoras, relajantes y agradables que duran una hora por la cual se pagó hasta 7 euros. La que mas recuerdo por eliminar los dolores de las malas posiciones y el estrés, fue la que me hizo una mujer ciega, que al terminar la terapia, me sentí totalmente nuevo para retornar la jornada y partir luego para Camboya.
Estando en un centro de masajes de varios pisos gozando de las terapias pudimos deducir que son numerosas las mujeres que viven y trabajan en cada centro dejando la leve sensación que son reclutadas a la fuerza en las provincias y traídas a la capital y entrenadas para hacer las terapias a cambio de la manutención. Interactuando con las cuatro que nos atendieron, ellas estaban dispuestas a dejar el país para seguir en el mismo oficio convencidas que sería mas reconocido y valorado su servicio terapéutico.
