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viernes, 7 de abril de 2023

¿Y dónde están las manos de Dios?

 

 

                          09/11/2022

                             D.R.A.

Regresando al campo donde nací, visualicé veredas pobladas de bovinos en otrora parcelas con alimentos sembradas; aprecié las casas de barro, desmoronándose con el abandono y me pregunté: ¿Dónde están las manos de Dios a quien rezamos con los abuelos por caminos, lodazales y lomas poblados por laboriosos campesinos?

 

Regresé a la ciudad y abandoné el confort de mi espacio familiar; trepé en buseta hasta las colinas que anidan miles de ranchos de tabla aunados como fichas de dominó atajados con llantas y barrancos y encontré rostros tristes y lánguidos de ancianos, mujeres y niños desplazados de los campos, rebuscándose la vida para sobrevivir en la selva de cemento con amplias avenidas y rascacielos poblados por hombres con afanes indiferentes que menosprecian a los de sombrero y carriel, ruana, poncho y pañolón, y me pregunté: ¿ Dónde están las manos del Dios que nació en un pesebre para enseñarnos, amor, ternura, fraternidad y compasión?

 

Leí estadísticas y éstas revelan que las riquezas están cada vez más concentradas en pocas manos de magnates globales que imponen mandatarios, entretanto, los pobres se acrecientan en millones eligiendo sus voceros, mientras el hambre es el pan de cada día y la migración internacional es creciente y en diversas latitudes; entonces, me preguntó: ¿Dónde están las manos del Dios de los ejércitos y del Dios del amor de los cristianos?

 


Escucho los argumentos del presidente ruso Vladímir Putin justificando su guerra a Ucrania; presto atención a los argumentos de Volidímir Zelenski, presidente ucraniano, y me pregunto: ¿ Dónde están las manos del Dios de los ortodoxos?

 

Atisbo que, en los marginados del desarrollo y los privados de oportunidades, se expande la cultura de la admiración a la riqueza, a la ostentación, al riesgo, a la violencia para obtener dinero,  y me pregunto: ¿Son las manos del mismo Dios de los pobres cultivadores de coca, de los raspachines, de los traquetos, de los traficantes, expendedores y consumidores de drogas alucinógenas?

 

Cuando fisgoneo en el sistema judicial y confirmo que es paquidérmico y laxo para las gentes de bien e injusto para los nadie; no investiga, ni sanciona a los saqueadores legales de los fondos públicos, me pregunto: ¿Dónde están las manos del Dios de la justicia?

 

Cuando tránsito por las ciudades atiborradas de gente que va y viene y miro a ancianos tirados en la calle implorando unas monedas y niños en la mendicidad, me pregunto: ¿Dónde están las manos de Dios misericordioso?

Cuándo me entero por noticias los aterradores infanticidios que cometen algunos padres y familiares de niños inocentes, me pregunto: ¿dónde está Dios que en sus escrituras anunció que hay que ser como niños para llegar al reino de los cielos?

 

Cuando en noches de desvelo, deambulo curioseando por calles iluminadas con bombillos rojos, bares y música estridente, y observo a adolescentes ofreciendo su cuerpo para llevar un pedazo de pan a la pieza donde se acinan, me pregunto: ¿ Dónde están las manos de Dios que se hizo hombre para enseñarnos humildad, igualdad, dignidad y amor al prójimo?

Cuando en las madrugadas camino por las calles comerciales de la ciudad para envejecer con lentitud, y observo parejas con sus hijos durmiendo en un rincón tapándose con un plástico para guarecerse del frio, me pregunto: ¿ Dónde están las manos del Dios, peregrino?

Entonces, me enfrento a Él. ¡Le recrimino¡ preguntándole:

- ¿Dónde están sus manos, Señor?

-¿Para sembrar amor?

-¿Para sembrar justicia?

-¿Para dar amor?

-¿Para dar un consuelo?

-¿Dar una caricia?

-¿Brindar un pan y un café?

-¿ Despertar una esperanza?,

- ¿Tejer una paz personal y comunitaria?

 

…No me interrumpió.

 

Luego de un silencio amoroso, escuché su voz con una pregunta:

-¿ Aún no te has dado cuenta de que mis manos, son tus manos?

Y con una voz paternal me invitó a atreverme a usar mis manos al servicio del reino de Dios labrado en esta tierra por los humanos de buena voluntad.

Y comprendí entonces que las manos de Dios son tus manos, son mis manos y son las manos de los humanos con voluntad para tejer lazos de fraternidad, igualdad, equidad y justicia, empeñados en construir con manos solidarias un mundo más humano, más fraterno y equitativo con oportunidades para los humanos de buena voluntad.

Las manos de humanizados, mudos ante la crítica negativa y destructiva, mudos ante el odio y desprecio de la gente de bien, pero dispuestos a auxiliar y fraternizarse con los nadie enarbolando sus derechos y denunciando su marginación y desprecio por los desechables, los pobres, los marginados, los migrantes y los hambrientos de la tierra.

Tus manos amigo lector, amigo oyente, fueron signadas por Dios para sembrar su amor entre los humanos.

 

He querido olvidarte. Poema

 

“La poesía no quiere adeptos,

quiere amantes”

Federico García Lorca

Poema 286

                15/02/2023


He querido arrinconar tus recuerdos, pero no he podido;

el perfume de tu cuerpo olisqueo en brisas tempraneras,

la sapidez de tus labios humecta mis nostalgias,

tu sonrisa singular, invade mi memoria,

el caramelo de tus ojos endulza reminiscencias,

el marrón de tus pecas sazona añoranzas.

 


He querido olvidarte, pero no he podido.

Intentaré esta vez encerrarte en un cofre de olvido,

lo dejaré en alta mar al vaivén de las olas sin mar.

 

Liberaré tus recuerdos en el océano primaveral,

usaré VapoRub en las madrugadas,

desayunaré con piña para remplazar tus besos,

encerraré mi memoria en valija de amnesia,

contemplaré el cenit para olvidar tus ojos ,

dejaré de tomar café y chupar caramelos

El parasitismo del plagio intelectual

  El apropiarse de los méritos de otro u otros, el copiar y usar palabras e ideas de otros y sustentarlas o escribirlas como propias y usa...