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viernes, 6 de noviembre de 2020

Absuelva mis pecados, Señor.

 

¡Usted me perdonará¡ Diosito por no haberme confesado, aún.


Es que, desde mediados de marzo del 2.020, no he podido, ni regresar al colegio, ni ir a la Iglesia; pero no voy a esperar más. Le escribo para confesarme, contarle las pocas alegrías, los muchos sinsabores, mis temores, mis pensamientos y mis peticiones anhelando que esta vez, como antes de la pandemia, me escuche, me calme las angustias y las ansiedades, y en especial, por tener pensamientos diversos y raros de algunos de mis profesores del colegio, a los cuales, no creo que vuelva a ver este año. Le escribo para que me comprenda, perdone mis pecados de pensamiento, palabra y obra y me absuelva con su amor.


Empiezo contando cómo me siento estando confinado y aislado.


Por las clases virtuales y la sarta de tareas que dejan los docentes, vivo sentado 15 horas diarias frente a una pantalla que no remplaza, ni a mis compañeros del curso, ni a los de mi colegio; menos a los profesores. Usted sabe que mi colegio es de dos plantas y tiene dos sencillos patios a los que salimos al descanso y a educación física y aprovechamos para tomar el sol; pero vivo con mis padres mayores en un apartamento con cuatro ventanas y solo a dos de ellas, entra el sol en las mañanas y por las otras dos, el frio en las noches.   Es como estar en una celda con acceso a internet, pero no tengo con quien socializar; hablo solo y grito mientras hago mis diseños en roblox, pero no remplazan a las personas del colegio. Usted no requiere de celular para comunicarse, usted debe disfrutar su soledad viéndonos y juzgándonos. Yo sí, para hablar con mis hermanos y usar en las clases.  A usted no se le cae la señal de internet; a mí, sí, con frecuencia; igual a varios profesores.  


Pido perdón por mis dudas, Dios. Dudas sobre el origen del covid-19. ¿Fue usted para obligar al hombre a enmendarse por el daño causado al paraíso que entregó a la humanidad para acrecentar su creación y estamos destruyendo? ¿O fueron los chinos para apoderarse del mundo? Perdóneme, pero si fueron los de los ojos rasgados, también dudo porque ellos eran muchos los pobres, y en menos de medio siglo han logrado sacar a media población de la pobreza. Lo cierto es que el virus deja dolor, muerte en numerosas familias creyentes o no creyentes.


Pido perdón porque sigo siendo un estudiante del nivel bajo. Lo dicen mis profesores, y ya lo creen mis padres cuando revisan el boletín.


No es para justificarme, pero le voy a contar impresiones sobre las asignaturas y docentes del grado octavo de mi colegio. Un colegio privado de varios que existen en San Gil. Lo hago para expiar mis pecados de pensamiento y de obra.


En el área de ciencias y ambiental uno se entera del origen de la vida, incluso del átomo. En el último periodo, al fin hicimos una práctica con observación, registro grafico y conclusiones. Sembré semillas, esquejes y bulbos. Tres semanas después mediante un video editado y con audio, presenté la tarea, que la profesora evaluó en bajo porque exigía el video sin editar, tal vez para medir el tiempo invertido; sin embargo, aprendí a apreciar el milagro de la vida y observarla para aprender de ella.


De la asignatura de sociales no tengo de que confesarme. Cada vez me enamoro de ella porque la orienta un maestro con una gama cultural que nos ata a sus clases: Para él fue  mas valioso las preguntas que se le hagan y los relatos que hicimos sobre el origen, de derechos y deberes y de los derechos humanos que tienen los textos de la guía.  


En artística, la base es el dibujo técnico y aprenderlo escuchando sin practicar es como confesarse y no comulgar; sin embargo, sigo haciendo diseños. Mi último juego lo hice en 3D y gozo de numerosos seguidores.


Dios, usted no me vaya a poner mucha penitencia; pero es que debo contarle porque crece en mí, la duda sobre la ética y moral y su aplicación en la vida. Este año esa asignatura la designaron a una profesora de matemáticas.


Perdóneme Diosito. Tengo varios pecados mortales.


Mi primer pecado mortal lo cometí en educación física. Mi profe nos enseñó voleibol y de cada clase teníamos que hacer un video, mínimo con 15 golpes al balón. Pues perdí porque entrenar con un balón en mi pieza; y a la vez grabar el video, es de ventrílocuos. Y como él es mi director de grado, por sus señalamientos, soy la mascota del grado.


Usted se va a ofender mas con lo que le voy a contar de la asignatura de filosofía; bueno de la historia de la filosofía y la religión.  Mi profe es una mujer joven y bonita, pero no se le puede preguntar, menos controvertir y nos evalúa con cuestionarios de comprensión lectora sobre textos que narran como el cristianismo incorporó la filosofía griega para expandirse.  Fue escasa la explicación de la esencia de la filosofía griega y el ejemplo de vida de cada uno de sus pensadores; pero la profe se explayó en la patrística y la escolástica y mis anhelos de conocer y practicar el método mayéutico, se esfumó, pues ninguna afirmación en clase y preguntas en una evaluación, tienen como referencia la situación del mundo, y en particular de Colombia, mi patria.

Dios santo perdóneme otra vez. Es que a las matemáticas no les encuentro cabeza ni cola. Mi padre dice que son fundamentales para la vida, pues él empezó a hacer negocios desde los siete años vendiendo naranjas y limones; pero yo, aun no le encuentro relación ni entre las operaciones básicas y su utilidad en la vida, ni entre las asignaturas.


Pienso que la asignatura de lengua castellana y lectoescritura deberían estar estrechamente interrelacionadas en el pensum y en la práctica. Además de tener buena letra legible y leíble y aplicando las normas de ortografía, quienes instruyen en las dos asignaturas deberían empeñarse en inducir a los estudiantes a la lectura para comprender y a escribir para transformar. Deberían enseñar técnicas de lectura; técnicas de redacción, técnicas de comprensión, interpretación y argumentación; pero este año nos limitamos a leer unas sesenta paginas de un libro por periodo y a contar lo leído usando el video, el teatro y la pantomima, esfumándose el gusto por empezar y terminar un texto completo y contarlo, incluso cambiando en final de la historia o relato.

Perdóneme, Señor ¡

Igual pido perdón a los profesores por lo que voy a afirmar: 2.020 fue un año de intenso trabajo para los maestros y alumnos, pero la efectividad de la instrucción fue menor que las clases presenciales. En mi colegio los módulos no fueron adaptados a las circunstancias generadas por el confinamiento. Se usaron los mismos de otros años. Y en el caso de mi colegio, hubo numerosos alumnos que no tenían acceso a internet; les tocó usar el celular para recibir información y entregar evidencias de las tareas.

El covid-19 y su expansión y sus efectos nos va a mantener muchos meses aislados y confinados. La presencia en el mundo esta dejando a numerosas familias sin trabajo, sin sustento y a muchos niños sin estudio.

Si no es un castigo suyo y es el resultado de los desafueros de las potencias económicas y su expansión en buena parte por el descuido de las personas que no usan las normas de bioseguridad, es otra plaga para la humanidad como lo fue la peste negra, la viruela, la gripe y la sífilis para los indígenas cuando fue traída por los conquistadores reduciéndose la población en un noventa por ciento en menos de cien años.

 

 

 

 

El parasitismo del plagio intelectual

  El apropiarse de los méritos de otro u otros, el copiar y usar palabras e ideas de otros y sustentarlas o escribirlas como propias y usa...