¡Usted me
perdonará¡ Diosito por no haberme confesado, aún.
Es que,
desde mediados de marzo del 2.020, no he podido, ni regresar al colegio, ni ir
a la Iglesia; pero no voy a esperar más. Le escribo para confesarme, contarle
las pocas alegrías, los muchos sinsabores, mis temores, mis pensamientos y mis
peticiones anhelando que esta vez, como antes de la pandemia, me escuche, me
calme las angustias y las ansiedades, y en especial, por tener pensamientos
diversos y raros de algunos de mis profesores del colegio, a los cuales, no
creo que vuelva a ver este año. Le escribo para que me comprenda, perdone mis
pecados de pensamiento, palabra y obra y me absuelva con su amor.
Empiezo
contando cómo me siento estando confinado y aislado.
Por las
clases virtuales y la sarta de tareas que dejan los docentes, vivo sentado 15
horas diarias frente a una pantalla que no remplaza, ni a mis compañeros del
curso, ni a los de mi colegio; menos a los profesores. Usted sabe que mi
colegio es de dos plantas y tiene dos sencillos patios a los que salimos al
descanso y a educación física y aprovechamos para tomar el sol; pero vivo con
mis padres mayores en un apartamento con cuatro ventanas y solo a dos de ellas,
entra el sol en las mañanas y por las otras dos, el frio en las noches. Es como estar en una celda con acceso a
internet, pero no tengo con quien socializar; hablo solo y grito mientras hago
mis diseños en roblox, pero no remplazan a las personas del colegio. Usted no
requiere de celular para comunicarse, usted debe disfrutar su soledad viéndonos
y juzgándonos. Yo sí, para hablar con mis hermanos y usar en las clases. A usted no se le cae la señal de internet; a
mí, sí, con frecuencia; igual a varios profesores.
Pido perdón
por mis dudas, Dios. Dudas sobre el origen del covid-19. ¿Fue usted para
obligar al hombre a enmendarse por el daño causado al paraíso que entregó a la
humanidad para acrecentar su creación y estamos destruyendo? ¿O fueron los
chinos para apoderarse del mundo? Perdóneme, pero si fueron los de los ojos
rasgados, también dudo porque ellos eran muchos los pobres, y en menos de medio
siglo han logrado sacar a media población de la pobreza. Lo cierto es que el
virus deja dolor, muerte en numerosas familias creyentes o no creyentes.
Pido perdón
porque sigo siendo un estudiante del nivel bajo. Lo dicen mis profesores, y ya
lo creen mis padres cuando revisan el boletín.
No es para
justificarme, pero le voy a contar impresiones sobre las asignaturas y docentes
del grado octavo de mi colegio. Un colegio privado de varios que existen en San
Gil. Lo hago para expiar mis pecados de pensamiento y de obra.
En el área
de ciencias y ambiental uno se entera del origen de la vida, incluso del átomo.
En el último periodo, al fin hicimos una práctica con observación, registro
grafico y conclusiones. Sembré semillas, esquejes y bulbos. Tres semanas
después mediante un video editado y con audio, presenté la tarea, que la
profesora evaluó en bajo porque exigía el video sin editar, tal vez para medir
el tiempo invertido; sin embargo, aprendí a apreciar el milagro de la vida y
observarla para aprender de ella.
De la
asignatura de sociales no tengo de que confesarme. Cada vez me enamoro de ella
porque la orienta un maestro con una gama cultural que nos ata a sus clases:
Para él fue mas valioso las preguntas
que se le hagan y los relatos que hicimos sobre el origen, de derechos y
deberes y de los derechos humanos que tienen los textos de la guía.
En artística,
la base es el dibujo técnico y aprenderlo escuchando sin practicar es como
confesarse y no comulgar; sin embargo, sigo haciendo diseños. Mi último juego
lo hice en 3D y gozo de numerosos seguidores.
Dios, usted
no me vaya a poner mucha penitencia; pero es que debo contarle porque crece en
mí, la duda sobre la ética y moral y su aplicación en la vida. Este año esa
asignatura la designaron a una profesora de matemáticas.
Perdóneme
Diosito. Tengo varios pecados mortales.
Mi primer pecado
mortal lo cometí en educación física. Mi profe nos enseñó voleibol y de cada
clase teníamos que hacer un video, mínimo con 15 golpes al balón. Pues perdí
porque entrenar con un balón en mi pieza; y a la vez grabar el video, es de
ventrílocuos. Y como él es mi director de grado, por sus señalamientos, soy la mascota
del grado.
Usted se va
a ofender mas con lo que le voy a contar de la asignatura de filosofía; bueno de la historia de la filosofía y la religión.
Mi profe es una mujer joven y bonita, pero no se le puede preguntar,
menos controvertir y nos evalúa con cuestionarios de comprensión lectora sobre
textos que narran como el cristianismo incorporó la filosofía griega para
expandirse. Fue escasa la explicación de
la esencia de la filosofía griega y el ejemplo de vida de cada uno de sus
pensadores; pero la profe se explayó en la patrística y la escolástica y mis
anhelos de conocer y practicar el método mayéutico, se esfumó, pues ninguna
afirmación en clase y preguntas en una evaluación, tienen como referencia la
situación del mundo, y en particular de Colombia, mi patria.
Dios santo
perdóneme otra vez. Es que a las matemáticas no les encuentro cabeza ni cola.
Mi padre dice que son fundamentales para la vida, pues él empezó a hacer
negocios desde los siete años vendiendo naranjas y limones; pero yo, aun no le
encuentro relación ni entre las operaciones básicas y su utilidad en la vida,
ni entre las asignaturas.
Pienso que
la asignatura de lengua castellana y lectoescritura deberían estar
estrechamente interrelacionadas en el pensum y en la práctica. Además de tener
buena letra legible y leíble y aplicando las normas de ortografía, quienes
instruyen en las dos asignaturas deberían empeñarse en inducir a los estudiantes a
la lectura para comprender y a escribir para transformar. Deberían enseñar
técnicas de lectura; técnicas de redacción, técnicas de comprensión,
interpretación y argumentación; pero este año nos limitamos a leer unas sesenta
paginas de un libro por periodo y a contar lo leído usando el video, el teatro
y la pantomima, esfumándose el gusto por empezar y terminar un texto completo y
contarlo, incluso cambiando en final de la historia o relato.
Perdóneme,
Señor ¡
Igual pido
perdón a los profesores por lo que voy a afirmar: 2.020 fue un año de intenso
trabajo para los maestros y alumnos, pero la efectividad de la instrucción fue
menor que las clases presenciales. En mi colegio los módulos no fueron
adaptados a las circunstancias generadas por el confinamiento. Se usaron los
mismos de otros años. Y en el caso de mi colegio, hubo numerosos alumnos que no
tenían acceso a internet; les tocó usar el celular para recibir información y
entregar evidencias de las tareas.
El covid-19
y su expansión y sus efectos nos va a mantener muchos meses aislados y
confinados. La presencia en el mundo esta dejando a numerosas familias sin trabajo,
sin sustento y a muchos niños sin estudio.
Si no es un
castigo suyo y es el resultado de los desafueros de las potencias económicas y
su expansión en buena parte por el descuido de las personas que no usan las
normas de bioseguridad, es otra plaga para la humanidad como lo fue la peste
negra, la viruela, la gripe y la sífilis para los indígenas cuando fue traída
por los conquistadores reduciéndose la población en un noventa por ciento en
menos de cien años.
Josue Orlando Villamizar R
ResponderEliminarJaja... Muy bueno.... Aquí con maestra a bordo.... disfrutando de los pecados del muchacho....
Apreciado colega, Josué Orlando.
ResponderEliminarSu corta estadía en la Belleza, como pedagogo y administrador educativo es recordado por quienes en ese entonces fueron alumnos del colegio Don Bosco, mas por su testimonio de vida, sus orientaciones y su optimismo.
Desde esa óptica, y observando a Nancy en su labor docente, infiero que le estará dando la absolución al contrito alumno que revela en la confesión los efectos de la pandemia en la comunidad educativa.
2.020 en el sector educativo será recordado porque a los padres les tocó adicionarse otro rol, el de orientador de tareas. Los estudiantes, poco aprendieron y los maestros, mas trabajo, mas estrés y menos logros en el desarrollo profesional.
Un saludo de las tierras veleñas.
sacerdote, Arturo Romero Marín
ResponderEliminarSin duda no hay como la presencialidad, para poder interactuar e intercambiar saberes
Rvdo, cordial saludo. Por los lares de su localidad.
ResponderEliminarIgual comparto su afirmación. Es la presencialidad, así como el afecto diario de los padres, el efecto positivo en la educación de los niños y jóvenes.
igual ocurre el la liturgia. El asistir al templo ye ver escuchando al sacerdote es enriquecedor. La educación virtual en 2.020 en caso del preescolar, primaria y secundaria, dejará resultados negativos en la comunidad educativa.
Luz Aleida Hernández Ruiz
ResponderEliminarEste año los padres de familia resultan ser los mejores docentes de sus hijos.
En lo que me corresponde, yo no tuve “sarta de tareas” este año; sin embargo, sí me enteré de la vicisitudes por las que los estudiantes tuvieron que atravesar este año; así mismo, que al gremio docente se le aumentaron las horas de preparación de los tales módulos. Finalmente, me identifico mucho con las nociones escritas en los cuatro últimos renglones de este excelente articulo! Gracias
EliminarCordial saludo, apreciado santandereano residenciado en EU. Menos mal que en el 2.020 usted no tuvo "una sarta de tareas"; pero en el tiempo transcurrido se gestó este pensamiento que transcribo para recordar al lector su identificación con este párrafo del relato: "
Eliminar"Si no es un castigo suyo y es el resultado de los desafueros de las potencias económicas y su expansión en buena parte por el descuido de las personas que no usan las normas de bioseguridad, es otra plaga para la humanidad como lo fue la peste negra, la viruela, la gripe y la sífilis para los indígenas cuando fue traída por los conquistadores reduciéndose la población en un noventa por ciento en menos de cien años".
Cordial saludo.
ResponderEliminar2.020 por la presencia de la pandemia en el sector educativo, sin lugar a dudas, revela el año lectivo, numerosas lecciones. Adicional a las que narra el personaje del relato, usted suma el esfuerzo de los padres de familia, en especial de la madre que sumo otra jornada adicional a las tres usuales.
Los padres de familia comprendieron lo difícil que es el ejercicio docente, a la vez, valoraron la importancia de la presencialidad de los estudiantes y apreciaron que en educación, ya para párvulos como para niños y jóvenes, la educación mas valiosa, es la que se ejecuta cara a cara.
Licenciado y escritor, Pedro A. Mateus M.
ResponderEliminarDios santo perdóname si lo que voy a decir son puros disparates...las mejores escuelas de la humanidad fueron el pripato de Aristóteles dónde se recibían las lecciones de maestro paseando por un jardín...
la escuela socratica en la que maestro iba a las calles y a los parques a buscar a sus discípulos para dialogar con ellos...
la del Maestro Jesús de Nazaret que enseñaba en los campos ...en las playas ...y en las plazas públicas...de dónde se deduce que la razón de ser de la escuela es que sea presencial donde el estudiante pueda compartir con el maestra a la vez que comparta con sus compañeros de aula...
la llamada educación a distancia ahora virtual es un fiasco...dará títulos pero no educa a los ciudadanos...que la emergencia no nos castigue dejándonos enquistado el sistema...que volamos a la educación presencial.
Mi apreciado licenciado Mateus, adhiero a sus disparates y al acto de contrición por ellos.
EliminarSi el aprender a pensar es la misión de la filosofía y la educación, porqué hoy quienes tienen esa misión no acuden a la historia para aprender de los maestros de antaño, como Sócrates, Plato y Aristóteles?
Para el preescolar, la primaria y la secundaria, igual afirmo que la educación virtual y a distancia es "un fiasco". El no reconocerlo es omitir que la formación de los hijos, se puede hacer a la distancia.
No se están formando ciudadanos, se están informando a los destinatarios matriculados; pero con una información descontextualizada.
Si no aparece la vacuna. Si el virus, muta. Si el Estado flexibiliza mas los cuidados para evitar el contagio; el 2.021 será otro año perdido en las preocupaciones del encierro y la perdida del cara a cara en la presencialidad escolar.
Compañero, gracias por enriquecer el relato con su comentario.
Hablar del dia a dia con el Dios que llevamos dentro, es muestra de la FE practica en la divina providencia.
ResponderEliminarBuenas noches apreciado poeta Rubén Dario.
EliminarSi el hablar con y abandonarnos al Dios que vive en uno, es un habito diario, seguramente nos permite vivir en paz con uno mismo y con el prójimo.
Un saludo desde la tierra veleña. ahora ya con internet en casa.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarCARMENZA POVEDA. BOGOTA
ResponderEliminarNauro..... Buenos días...... Como estas?
Excelente artículo.... Para mi pensar....
No solamente hay falencias en la educación sino en todos los ámbitos de nuestras vidas y no solamente los niños y educadores la tienen.....
El gobierno y todos aquellos que nos dirigen tienen una gran culpa porque solo se dedican a ver que pueden sacar de sus intervenciones políticas y sociales, estamos rodeados de seres inmorales sin escrúpulos y no piensan sino en el bien propio.....
Yo creo que todo esté mal que hay a nivel mundial se reversar a otra vida tendríamos los humanos, la educación no tendría tantas falencias, los profesores no tendrían que trabajar con las uñas, los campesinos también tuvieran lo suyo, porque en realidad están muy golpeados por el sistema.... No habría tanta delincuencia común, criminales, porque todo esto se disparo a raíz de la pandemia, la violencia intrafamiliar y está en todos los estratos y todo esto y mucho más salió a la luz por el bichito y que no sabemos que más nos espera.....
Que Dios nos proteja de tanta maldad y gracias por tu excelente artículo que nos hace pensar en la humanidad y en nosotros mismos..... Un gran abrazo y es mi humilde pensar. 👍😉🙅😘
Reconfortan lectoras que gustan de la lectura, la comprenden e interpretan. Y tu, especialmente que me animas con tu compañía en historias sin contar.
EliminarMientras la inteligencia artificial avanza velozmente, la economía se concentra cada vez en menos manos, lo social, la equidad humana, la igualdad en derechos, pareciera que se desmorona; pero hay fuerzas que intentan equilibrar la balanza.
Los m.m.c.s. solo transmiten hechos de sangre, hurtos, violencia y asuntos de interes para las empresa y estados; pero la gente sigue tomando conciencia que esta pandemia nos dejará mas pobres, menos sociables y mas aislados, incluso de la familia.
Gozo leyendo tus comentarios porque enriquecen mis relatos y me ayudan a ver con otros lentes mis mismos relatos.
Esta pandemia desnudó, o mejor miramos lo que no veíamos, que la educación, sus contenidos, estrategias, dogmas y metodologías están centradas en el pasado, y no se esta capacitando y ni preparando a los niños y a los jóvenes para el mañana.
Tu que gozas de ser critica, previsiva, recursiva y proactiva, al ver crecer a tus nietos, te preguntaras a que cambios estarán abocados. De la educación que recibimos, a la de hoy hay distancia en la praxis, en la ética y en la moral.
Hermes Miguel Garcia Ruiz Bogotá
ResponderEliminarHola profesor Nauro, las vivencias de incertidumbre, culpa, dudas, dificultades e interrogantes del alumno en ese soliloquio son el común, no solo de los estudiantes, sino de todo el mundo; y para muchos, los pecados son capitales. Todo a futuro tiende a ser virtual y tendremos que acostumbrarnos. Ojalá no pasemos de los veniales.
Si hay falencias en la educación presencial, peor es la virtual .
No hay como podernos mirar a los ojos, y sentirnos cerca .
No es lo mismo conocer el mar por TV,que dejarnos mojar por las olas.
Un abrazo.👏👏👏
Si, de acuerdo, el presente, mas el futuro es de la inteligencia artificial. Y ni las universidades, menos la secundaria y primaria, aun no se percatan de ello.
ResponderEliminarAsí como el covid-19 llegó para quedarse, las Tics, o las reconocemos y aprendemos a usarlas, o nos arriman al cuarto de los trastos viejos.
Totalmente de acuerdo con usted. "Si hay falencias en la educación presencial, peor es la virtual".
Agradan sus dos últimos dos párrafos están saboreados de literatura exquisita: "No hay como podernos mirar a los ojos, y sentirnos cerca". Y..." No es lo mismo conocer el mar por TV, que dejarnos mojar por las olas".
Un abrazo veleño en estos dias de lluvia y neblina. Gracias por estar presente en Historias sin contar.