ESCAPESE DEL RUIDO Y LA CONTAMINACION
A UN OASIS DE TRANQUILIDAD EN SANTANDER
Una casona campestre para disfrutar en pareja o en familia. Ubicada en el punto medio entre Bogotá y Bucaramanga. A 2150 metros de altura y con una temperatura de 17 grados.
En la ciudad se carece del aire puro, del olor a bosque, del arco iris, del aroma de las plantas, de un cielo azul y de un amanecer arrullado con el canto de los pájaros. Se carece de comida cocinada con leña y de lácteos frescos; se carece de vecindad, de tranquilidad al caminar y de atardeceres brillantes y contemplaciones al infinito.
El pasear por el campo mejora el estado de ánimo y las capacidades cognitivas, cohesiona las relaciones familiares, disminuye el dolor físico y desaparece el dolor espiritual.
El pasar un fin de semana o unas vacaciones en una finca, restablece las fuerzas físicas y las habilidades; aflora la paz, se aviva la felicidad, se acrecienta el amor y se eterniza la amistad. Se forma parte de la naturaleza y el visitante se deja enredar en su pureza desconectándose del mundo empresarial y el caos de la capital.
El campo y su tranquilidad es un espacio apropiado para leer, para escribir, para pensar. Oportuno para contemplar, para dejarse arrullar por el canto de las aves y el silencio, para compartir en pareja el universo. Es un lugar propicio para alejarse de las Tics, del ruido, de la contaminación, del estrés y el bullicio de las urbes.
CAMINO A LA POSADA MARGARITA (https://www.facebook.com/nauro.waldo/videos/10216099202854252/)
Puente Nacional está a 180 kilómetros de Bogotá por vía a Chiquinquirá, a unas 3, 15 horas de camino, sin afanes. El recorrido en auto se hace por pintorescos parajes que diferencian las tierras de Cundinamarca, Boyacá con las de Santander.
Y si se parte desde Bucaramanga, el trayecto hasta la posada es de 134 kilómetros invirtiendo unas 4,5 horas en cuyo trayecto de aprecia el paisaje santandereano que penetra al de Boyacá en la hoya del Suarez.
Al llegar a Barbosa, allí se puede provisionar de verduras, carnes y lo que se tenga planeado consumir en familia.
Viajando desde Bogotá, en Ubaté se puede degustar la arepa boyacense con un yogur, o se puede almorzar al calor de la estufa de leña. En Chiquinquirá hay que dar un corto paseo para contemplar la zona colonial y visitar la basílica de la Virgen de Chiquinquirá. En Garavito es un deleite degustar las arepas de trigo rellenas con cuajada o las tortas de queso, las almojábanas, las mantecadas y las mogollas de trigo.
Al descender, sin darse cuenta se llega a Santander en una curva con un puente, descolgándose en paralelo al río Sarabita o Suárez que se oxigena, purifica e hinche al romper la paz de los robledales hasta cruzar el mismo río y tomar una pendiente desciendo un par de kilómetros hasta cruzar la quebrada Otero (Aqui, al margen derecho, esta el acceso 1 a la Ecoposada, trepando y descendiendo 12 kilómetros) por cuyo costado trepa una carretera hasta las ruinas de la estación del tren conocida como Los Robles.
Un segundo acceso esta unos pocos kilómetros después de la estación de servicio Texaco, y al mismo lado izquierdo se observa un balneario, y a unos 200 metros, la recta carretera se dobla a la izquierda en angulo de 45 grados, y al tomar el descenso, a unos cincuenta metros, al lado derecho de la vía, está otro acceso a la Ecoposada, conocido como las diosas, para ir a otra estación del tren conocida como Providencia, la cual, está a unos cinco kilómetros yendo siempre en línea transversal.
Se toma la vía campestre en el sitio conocido como las diosas, lugar en donde existe una sencilla caseta donde ofrecen frutas y bebidas que está al lado opuesto del acceso 2.
Tomado el ramal a Providencia el auto se moviliza como si se fuese por un sendero rodeado de árboles y montañas en el horizonte; luego de una curva al margen derecho, la trocha se bifurca a la derecha con el acceso a la estación del Guayabo; y más adelante; se vuelve a bifurcar pero al lado izquierdo con otro ramal por el que uno se puede descolgar a Puente Nacional, pero siguiendo el horizonte, en menos de diez minutos, el auto aparece lindando con la estación Providencia; una construcción estilo republicano terminada en 1930, próxima a restaurarse por ser considerada “un bien de interés cultural del ámbito nacional” desde 1976.
Se atraviesa la calle pavimentada hasta coronar la cima; y ya allí, se trifurca la vía tomando a la derecha y trepando unos siete minutos (1,4 kms) por la carretera hasta que ésta, se escabulla entre pinos para acceder a la Ecoposada la Margarita por un portón en piedra labrada con huellas en el mismo material que termina, en el fondo, siendo el garaje de los autos que se guarecen bajo la sombra de cincuentenarios pinos sembrados por los propietarios.
LA COLONIAL CASONA
La casona, Levantada en adobe en 1948, cubierta por teja de barro con el color del tiempo, es una vivienda campesina con corredores por los costados adornados por masetas con flores que penden escondidas en la gama del verde que rodea la campestre vivienda.
La casona tiene tres habitaciones con baño privado y dispone de dos habitaciones, una con dos camas sencillas, y una segunda, con cama semidoble. Todas las habitaciones disponen de tv. La posada tiene una ventilada cocina y tres comedores, uno de ellos, usado para los asados familiares. Dispone de tres salas y silletería movible en los corredores, y para las reuniones dispone de una batería de baños con vista a la provincia de Vélez.
Cómodamente se pernoctan 13 personas y hay elementos para dormir sobre colchones de aire para otras 4 personas. La posada tiene amplia zona para camping y la administración cuenta con dos carpas para 4 personas y elementos para facilitar dormir con los niños o en pareja a campo abierto.
Desde la casona se observa en el horizonte el flanco derecho de la cordillera oriental que, en las noches semeja un pesebre con el alumbrado de los municipios de: Bolívar, Sucre, Puente Nacional, Barbosa, Guavatá, Vélez y Palo Blanco.
A PAJAREAR Y AVISTAR AVES
Madrugar hospedado en la posada la Margarita, trae sorpresas para el visitante. Sorpresas espirituales y percepciones agradables.
Extasiarse contemplando la despedida de la noche y el surgimiento de la luz en el horizonte y la aparición del sol sobre la arboleda en las mañanas es acompañado con el cantar de aves diversas en los frondosos árboles que rodean la casona colonial. Manadas de toches, torcazas, ciotes, guacharacas, azulejos, copetones, cucaracheros, quinchas y arrendajos animan cada amanecer.
La casona esta guarecida de los vientos con un bosque de pinos y eucaliptos mezclados con especies nativas, por el cual se puede caminar y hacer la siesta en hamaca, o sin ella, al son del revolotear de las aves.
RECORRIENDO SENDEROS Y CAMINOS
La finca tiene 22 potreros, por los cuales se puede pasear guiados por el mayordomo para conocer los yacimientos de agua, la quebrada Jarantivá, nombre de la vereda.
Caminar por las praderas, apreciar los arroyos y los nativos arrayanes centenarios que adornan el paisaje y contemplar en el horizonte la belleza de la tierra del torbellino, la guabina y el bocadillo, se siente una paz espiritual y un relajamiento que agota los dolores y las preocupaciones.
Los más osados pueden solicitar participar en el ordeño o alquilar un caballo para cabalgar por la carretera, o hacer el recorrido a pie hasta los caseríos de Providencia y Quebrada Negra en los que hay tiendas de víveres y panaderías, incluso es novedoso probar el aguardiente “chirrinche” donde doña Custodia en la tienda la Esperanza.
En el recorrido, previa solicitud, se pueden visitar granjas para contemplar animales y cultivos de frutales. Encargar almojábanas, queso campesino y colaciones
LOS BALCONES DE LA COLORADA.
La vía por la que se llega a La Margarita, fue hasta 1968, un camino real, hoy convertido en carretera por la cual los ciclo montañistas y los amantes de las motos 4x4 hacen un periplo por cualquiera de los tres accesos que tiene la finca.
Con previa solicitud se puede ir en carro un trayecto, y por bellos potreros por un camino empedrado trepar entre robledales hasta unas vírgenes cascadas conocidas como los balcones de la colorada que tienen un puente natural en piedra. Desde este lugar se aprecian los contrastes de la geografía santandereana que se difumina con la boyacense. Por las cascadas corren aguas cristalinas de la quebrada La Colorada que nace en el páramo de en cuyos estribos se dio una cruenta batalla en febrero de 1902 en los postreros días de la guerra de los mil días, triste episodio que se recuerda con un obelisco en honor a los caídos en la batalla de maza morral.
LAS LAJAS DEL VOLADOR, UN LUGAR SIN IGUAL ( https://www.facebook.com/critogosap/videos/277361506101966/UzpfSTEyNzU0OTkyMTI6MTAyMTQwNzkyNDg4NzY2NjU/?q=las%20lajas%20del%20volador)
A unos cuatro kilómetros, por la vía que trepa desde Quebrada Negra hacia Los Robles, existe al alcanzar una leve colina, una casa de adobe a la vista recordada como las Palmas. En ese punto hay un camino de acceso que atraviesa un arroyo y a unos trecientos metros, en el lecho de la quebrada la Negra, hay una extensa y larga laja en piedra caliza que a la vista aparece como fragmentada adrede en rectángulos, y sobre ella, por uno de sus costados, se desliza cristalinos hilos de agua que invitan a descansar, ya bañándose o caminando, o simplemente extasiarse en una siesta entre el cielo y el lecho del manantial. A las cascadas también se puede acceder desde Quebrada Negra por la carretera que trepa a La Muralla.
Al pernoctar en La Margarita los amantes de la literatura tienen los espacios para la lectura o para conocer los personajes de las “historias sin contar” que cada semana uno de los dueños publica en el el blog naurotorres.blogspot.com Puede conocer a Yeyo el curandero ( http://naurotorres.blogspot.com.co/2016/02/desiderio-ortiz-el-curandero.html) o ir a la tienda de doña Custodia, el personaje de (http://naurotorres.blogspot.com.co/2016/03/las-mascotas-estimulan-las-emociones.html). O adentrarse en los espacios en donde vivió el personaje de las siguientes historias : (http://naurotorres.blogspot.com.co/2015/08/una-boda-sin-vino-y-sin-invitados.html) ( http://naurotorres.blogspot.com.co/2015/10/el-pomarroso-florece-pero-no-tiene.html)
PERIPLO POR SANTANDER O BOYACA
A 15 MINUTOS ESTA PUENTE NACIONAL, TIERRA DEL TORBELLINO Y LA GUABINA.
Puente Nacional es fuente del torbellino y la guabina en donde se pueden degustar los bocadillos o “el dulce tiodolindo” ( http://naurotorres.blogspot.com.co/2015/11/el-postre-de-naranja-de-puente-nacional.html) Y si es un lunes, ir a almorzar provocativa fritanga en el segundo piso de la plaza de mercado, o probar las delicias que los campesinos hacen con el maíz o la leche es un paseo entre las tradiciones gastronómicas del campo. Pero también se puede recorrer en poco tiempo algunas calles coloniales y casas con historia (http://naurotorres.blogspot.com.co/2015/09/la-cantarrana-esconde-los-jolgorios-y.html).
Desde Puente Nacional se puede acceder a La Margarita por una carretera que se mete al lado izquierdo a trecientos metros de la entrada al hotel Agua Blanca y a unos treinta metros arriba de la Bocadillería La Viña. Al tomar la carretera (Acceso 3) se descuelga hasta la quebrada Jarantivá para tomar una pendiente hasta llegar a Providencia, tomando desde ahí la vía hacia la montaña.
Desde Puente Nacional hay que visitar Barbosa, Jesús María, Guavatá, Vélez, Sucre y Bolívar en Santander y Moniquirá, Paipa, Leiva y Tunja en Boyacá.
EL CONVENTO DEL ECCE HOMO, EL VALLE DE LOS DINOSAURIOS Y LEIVA.
Estando en La Margarita y si se dispone de un automotor 4x4, trepando hacía el páramo se puede llegar en una hora a Santa Sofía, municipio frutícola, y desde allí al Convento El Ecce homo fundado en 1620; luego, al valle de los dinosaurios y se llega con facilidad y en poco tiempo a Leiva, monumento Nacional. De allí se puede desplazar al desierto de la Candelaria y regresarse a la posada por Chiquinquirá o desde Leiva, por Arcabuco a Barbosa.
ACCESOS, DISTANCIAS Y TIEMPOS
(Para autos se recomienda el acceso 2)
ACCESOS | LUGAR | DISTANCIA | TIEMPO |
Bogotá- Puente Nal. | 180 kms | 3 horas, 15” | |
Primer peaje salida de Bogotá-Quebrada Otero | 142 kms | 3 horas | |
Acceso 1 por la quebrada Otero a 12 kms | Quebrada Otero-Los Robles | 1,9 kms | 5 minutos |
Quebrada la Otero-Quebrada Negra | 8 kilómetros | 14 minutos | |
Quebrada Negra -La Margarita | 2 kms | 5 minutos | |
Acceso 2 Por las diosas a 7 kms | Peaje Bogotá- Las diosas | 162 kms | 3 horas |
Carretera Central- Providencia | 5.4 kms | 12 minutos | |
Providencia- La Margarita | 1.6 kms | 5 minutos | |
Carretea Central- La margarita | 7 kms | 16 minutos | |
Acceso 3 desde Puente Nacional por la bocadillería a 7 kms. | Puente Nal.-al acceso 3 Viniendo de Puente Nal, la bocadillería está a 30 metros antes de tomar el acceso 3 | 6,5 kms. | 16 minutos |
TRANSPORTE RURAL
Si la intención es llegar a la Margarita trasladándose en bus desde la capital, ya en Puente Nacional se puede contratar una camioneta 4x4 (cels. 3124081990-3145312722- 31073431789-) o tomar un taxi cuyo costo no supera los 8 dólares.
INFORMACION ADICIONAL
Se recomienda, si se desea comunicarse por celular, llevar un equipo de los primeros que gozan de buena señal, o alquilar uno en la casona.
La casona dispone de algunos juegos de mesa como rumi, Monopolio y Risk, cartas españolas, minitejo, rana y poker.
Hay amplios espacios para camping, tiene chimenea y hamacas y asador al carbón. Si no se desea cocinar, se pueden contratar las comidas, previa solicitud. Las familias que allí se citan con sus hijos que viven en Bogotá, llevan el mercado, y la señora del administrador les prepara los platillos deseados.
CONTACTO:
naurotorres@gmail.com
cel. 3203011050-3178572848